POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.
Obertura (en silencio).
1.-Se encienden las luces lentamente. En una pantalla traslúcida, se mostrarán imágenes (virtuales), que representen el recorrido histórico desde la llegada de los primeros pobladores a Tenochtitlan, destacando el mítico momento del hallazgo del águila devorando a una serpiente, y ambos montados sobre un nopal.
Vistas panorámicas de la ciudad de México-Tenochtitlan…, y luego la batalla que, en 1521 concluyó con la derrota de los aztecas. (Se sugiere música de Jorge Reyes). La narración conviene ser realizada con el énfasis más apropiado, tal cual se tratara de un relato.
2.-Escenas que correspondan a la mejor interpretación que, sobre el mestizaje y esa profunda y complicada relación habida entre españoles y pueblos originarios se dio durante el periodo de colonización, el cual se extendió por tres siglos. (Quien monte las imágenes, deberá pensar en la o las músicas más adecuadas). Además, lo que se mencione en esos momentos breves del relato visual, tendrá que adecuarse a las ideas que refuercen su sentido, con objeto de que la narración pueda ligarse con el sentido de los diálogos.
3.-El llamado a la emancipación deberá mostrar las imágenes que ilustren de mejor manera el estado de cosas que guardaba la última etapa del virreinato, con objeto de que los observadores comprendan algunas de las condiciones que encaminaron a los habitantes de aquel territorio a forjar, por vía de la independencia, el propósito de una nueva nación llamada México.
(Se recomienda que los tres episodios deban quedar resueltos en aproximadamente tres minutos).
Se apagan luces.
Cuadro independentista.
Aparecen en escena sólo dos personajes, al interior de una habitación.
EL: …y esa ha sido la manera en que nuestros padres, y sus padres, y los abuelos, y los otros abuelos nos han relatado desde entonces.
ELLA: Y esa es la historia que tenemos que seguir contando para evitar el olvido. Pues como dice mi padre “no hay peor cosa que ser desmemoriado”.
EL: O como decía mi madre: “vaya siempre hacia adelante sin olvidar quien es y de donde salió”. ¡Mi madre tan sabia! Ese me parece un gran consejo, pero yo por más que quiero ir adelante veo que nomás seguimos hacia atrás, y ya va siendo hora de cambiar eso.
ELLA: Por cierto, han llegado hasta aquí serios rumores de un levantamiento… ¿De qué se tratará.
EL: Pues de qué más, si desde hace mucho venimos pugnando por la misma cosa: quitarnos el yugo. Los españoles siguen empeñados en someternos, en desplazarnos y eso ya no podemos consentirlo. Si no hay modo de llenarles los arcones y aplacar su voracidad. Dicen que en España las cosas no van nada bien, que sostiene guerras y necesita de la plata que les mandamos, y así como les llega así se les va. ¡Qué despilfarro!
ELLA: Pero fíjate tú, por acá anda dando sermones el cura de Dolores, -con esas nuevas ideas que les llaman filosofía– ese cura sabe mucho, no por nada las malas lenguas lo llaman “El Zorro”.
EL: Se llama Miguel Hidalgo y Costilla y no dudo que sea capaz de algo muy importante; se sabe que es muy emprendedor y muy activo en la alfarería y la ganadería y…
ELLA: Y hasta con las mujeres…
EL: Ahí… sí yo no sé del hilo… Margarita es la que cose…
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
(Mientras el narrador da lectura a estos breves párrafos, los dos personajes realizan algunas actividades domésticas. Terminan y se retiran).
Detrás de toda gran revolución existe una causa económica. Los últimos años del siglo XVIII y primeros del XIX estuvieron plagados de diversos conflictos que afectaron severamente a la corona española y sus territorios americanos. España exigía más capital que sus colonias se veían obligadas a satisfacer. No conforme la economía novohispana se restringió aún más, lo que entre otros afectó a Miguel Hidalgo a quien se le retiraron créditos dada su esfera empresarial condición que afectaba sus deudas personales.
Una seria descomposición de condiciones sociales, políticas y económicas que polarizaban el ambiente de los primeros años del siglo XIX fue, el detonante de la independencia, encabezada por el cura de Dolores como uno más de aquellos afectados, no importando sus vínculos con la iglesia, institución que se vio alterada por su particular actitud. Así que el descontento social encontró en este y otros motivos, las suficientes razones para que la independencia fuera una realidad en 1810.
Independencia
cuadros tableau vivant
Pueblo
CORO: ¡Ha llegado la hora!
Doña Josefa
¡Conspiremos!
Pueblo
CORO: ¡Ha llegado la hora!
Morelos
¡Mi proclama será el anhelo de un nuevo país!
Pueblo
CORO: ¡Ha llegado la hora!
Hidalgo
¡Vamos a matar gachupines!, mientras empuña una tea.
Pueblo
CORO: ¡Ha llegado la hora!
Fiesta
Baile 1
Sketch: aparece en escena una pareja con ropa elegante mientras se escucha una danza o un minueto:
ELLA: …Te juro que me compré este abanico en El Parián.
EL: Tré biën´ n, tré biën´ n.
ELLA: Que lo importante es ir a la moda, hasta en el idioma, mi amor.
EL: Oye, y ¿tú crees que Iturbide se haya entendido así con Guerrero en el abrazo que dicen se dieron en Acatempan?
ELLA: No seas tontito…
Baile 2
Sketch: va apareciendo otra pareja mientras los compases de aquella música bajan (y los dos primeros bailarines van desapareciendo de la escena), en tanto suben intensamente los de un fandango, por ejemplo.
EL: Pos ya somos México.
ELLA: La verdá es que se siente re´bonito.
EL: Si mi chata, que la injusticia ya no vuelva por estos rumbos.
ELLA: Independencia, libertad, un nuevo país… ¡uy, qué difícil es entender todo esto!
EL: Ya lo entenderás… ya lo entenderán.
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
En los primeros años del nuevo estado-nación que fue México, las condiciones de este país mostraban profundos deseos de encontrar su verdadero destino. Sin embargo, una suma de fuerzas y de influencias generaron conflictos al interior que se vieron claramente marcados en la intromisión extranjera, en la lucha de liberales, conservadores y moderados, así como de una constante presencia de miembros del ejército en las decisiones fundamentales. Ello produjo una fragmentación, un país sometido al impacto de los bandazos políticos o económicos que se reflejaron en lo social. Un fiel de la balanza fue la promulgación de la Constitución de 1824.
Transición del fandango a esa danza o minueto.
NUEVO DIÁLOGO teniendo como escenario el cruce de alguna calle.
ELLA: Aunque queramos seguir viviendo como fue antes de la independencia, creo que ya no va a ser posible. Los rumores son cada vez más claros.
EL: ¿A qué te refieres? ¿O se molestan porque nos va a gobernar Su Alteza, don Agustín de Iturbide? ¡Esto ya es un imperio!
ELLA: No. Todo mundo busca otra realidad, y hay que reconocer que tienen razón. La sangre derramada en estos duros años que han pasado está cobrando forma en el país que se deseaba desde ese lejano 1810.
EL: Ay, creo que la tontita eres tú. Mira que volveremos a los viejos y añorados tiempos. ¡Habrase visto!
Transición de la danza o minueto al fandango en su parte climática:
EL: Mire mi chata, yo también lo veo como un futuro prometedor, pa´usté y pa´mí, y pa´todos estos que están aquí, pero el destino no sé que albur nos eche encima.
ELLA: Mire mi Nacho, y “ai” le voy: Valió la pena meternos en lo que nos metimos. Las balas no nos espantaron. Hasta me sento responsable de que los hijos que podamos tener uste y yo, sepan ahora sí, lo que´s la libertá.
EL: Luchita mía, Luchita de mi corazón. Mire nada más que cosas anda diciendo, y así es. Ya podemos andar de aquí pa´allá, o de allá pa´acá sin el peso de la monserga esa. Ora sí se que es eso de la libertá.
cuadros tableau vivant
Pueblo
CORO: ¡Es hora de proclamar la libertad!
Benito Juárez
¡Entre los pueblos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz!
Pueblo
CORO: ¡Es hora de proclamar la libertad!
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
La extensión geográfica de nuestro país se vio reducida con motivo de algunos acuerdos, pero también a los errores humanos cometidos en ciertos conflictos militares, encabezados en lo fundamental por Antonio López de Santa Anna, cuyos desaciertos siguen teniendo un costo histórico definitivo. La invasión norteamericana de 1847 representó, y sigue representando un verdadero atentado a nuestra conciencia, lo que significa revalorar aún más la imagen nacional en el concierto de las naciones. México, con todo y eso avanzaba en medio de diversos avatares, a pesar de una economía mermada, hombres y mujeres se empeñaron por aquellas épocas en encontrar un mejor destino.
SKETCH enlace, mientras esta pareja empieza a ser rodeada por un pequeño grupo que los escucha atentamente.
ELLA: Otros tiempos, muy parecidos se vinieron en el mismo año en que apareció el cometa, ese que se llamaba el Halley. ¿Sería un presagio? No lo sé, pero lo que sí sé es que se desató la revolución. Don Porfirio, además de viejo, se estaba volviendo un dictador.
EL: Ya lo creo.
ELLA: Mira que lo que ha hecho don Pancho Madero es lo correcto.
EL: Ya lo creo.
ELLA: Que lo que se están formando son verdaderas bolas, es lo que conviene y ya nada va a detener ese movimiento justo.
EL: Ya lo creo.
ELLA: Las causas tienen que ver otra vez con que encontremos a nuestro México por la senda de eso que llaman la democracia.
EL: Ya lo creo.
Y uno de los que escuchan, se dirige a EL, para preguntarle su nombre
Oiga don, como se llama usted, mire nada más, qué bonito habla.
EL: Yo soy Nacho, pa´servirle a usted, a Dios y a don Porfirio…
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
Don Porfirio, en efecto fue uno de los presidentes que, aprovechando diversas circunstancias, se eternizó en el poder. Se le acusa de “dictador” y de que su régimen haya sido el caldo de cultivo del que fue el movimiento revolucionario en 1910. Claro que creció el país, entró en una etapa de convivencia con otras naciones y los capitales –sobre todo de origen extranjero- pusieron en marcha infinidad de proyectos encaminados al progreso. Sin embargo, quedaron excluidos un sinfín de procesos, la marginación social se acentuó y, mientras un pequeño grupo elitista se adueñaba de los grandes capitales, una inmensa mayoría social se veía profundamente afectada en el campo y en la ciudad. Eran momentos de difícil transición, de deseos permanentes de cambio hacia una mejor estabilidad, pero esta no llegaba.
Revolución
(Viejo narrador acompañado de un guitarrista que toca a ritmo de corrido).
CORRIDO DE
EMILIANO ZAPATA
Autor: Anónimo
Un día Zapata los llama
a conferenciar al frente.
Todos juntos, en Iguala,
deben hacerse presentes.
Y cuando hablen han de ser
razonables y prudentes.
Como un río caudaloso
que acelera su corriente
la tropa marcha de prisa,
ya desciende la pendiente;
la va guiando la alborada
que asoma por el oriente.
– . –
Toda Iguala está de fiesta,
canta alegre el campanario;
mientras en los tamarindos
suspenso está el sol de mayo,
con voz serena a Zapata
esto le dice Salgado:
— Señor general Zapata:
esta tropa que aquí mira,
nunca al peligro le teme,
el nombre de usted la anima;
y en los combates, cada hombre,
por cuatro se multiplica.
La tropa y mis generales
su nombre y valor admiran,
y por seguir su palabra
de sus hogares se olvidan;
hoy vienen a saludarlo,
por conocerlo deliran.
(Habla el general Pantalones)
Aunque soy chaparrito,
me llamo Ciriaco Gómez,
pero el pueblo me ha cambiado
el nombre de mis mayores,
y hoy todo mundo me llama
el general Pantalones.
Traigo en mi apodo la fama
como el Tejón Solitario,
no le temo a la Huesuda
aunque me enseñe el rosario,
ni a las velas encendidas
ni al rezo del novenario.
(Habla el general Emiliano Zapata)
— Ya conocen mi bandera
muy sencillo es mi programa;
el campesino reclama;
desde un principio esta ha sido,
compañeros, mi proclama.
Ayudamos a Madero
a derrocar al tirano,
ya estando en el candelero
no quiso darnos la mano,
hasta que El Chacal su cuero
puso en venta muy ufano.
– . –
Y después del Cuartelazo
llega a la silla Carranza,
le tiende el pueblo su brazo,
en él pone su confianza;
aunque sea muy poco al paso
la Revolución avanza.
Más que Zapata, señores,
será la Revolución
la que premie sus valores
y les dé su galardón,
por ella pido que un brindis
hagamos esta ocasión.
Que estos tamarindos guarden
en su follaje mi voz,
que sean fieles testigos,
lo mismo que el padre sol,
de todo lo que se ha dicho
bajo su dulce frescor.
¡Viva Iguala, compañeros,
cuna de nuestra Bandera;
si los viejos insurgentes
murieron ayer por ella,
nosotros daremos hoy
nuestra vida por la tierra!
Muerte de Zapata
MONÓLOGO:
EL VIEJO: Mi General, ¿qué fue lo que pasó en Chinameca ese 9 de abril de 1919?
Todavía no alcanzo a comprender tanto misterio, todavía no sé por qué Jesús Guajardo -¡maldita sea!- fue capaz de semejante traición, y tantito peor cuando ese señor entró a su casa al meritito grito de ¡viva Carranza!
Yo que te recuerdo, Emiliano, perdóname que te diga así, -cómo se me va a olvidar el día que decidiste pronunciarte por el movimiento-, dejando comodidades allá en San Nicolás Peralta, donde eras el caballerango nada menos que de don Ignacio de la Torre y Mier, el yerno de don Porfirio, pa´luego aliarte con don Pancho Madero y convertirte, como de rayo en el “Caudillo del sur”.
Y mira cómo fueron después las cosas. Madero por un lado, Zapata por el otro, ese Zapata que siempre vimos montado a caballo –tan majo y tan catrín, buen charro pues-. Y hubo necesidá de la dureza pa´hacer ver la necesidá también de que nos hicieran justicia.
Y luego vino lo del plan de Ayala, en noviembre del 911, cuando nada más se oía a las afueras de la casa donde se reunió toda aquella gente: ¡Esos que no tengan miedo, que pasen a firmar!
Emiliano, Emiliano Zapata. Hasta que me muera, nunca se me va a olvidar aquello de Pueblo mexicano, apoyad con las armas en la mano este Plan, y hareis la prosperidad y bienestar de la Patria.
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
En efecto, la Revolución fue un movimiento suma de varios factores, que orillaron a infinidad de actores a intervenir para que el destino de este país alcanzara otra dimensión, la del progreso, la que, por otro lado, se negaba a darle ese privilegio a México. Poco a poco, y sobre todo en esos tiempos postrevolucionarios, se alcanzó a mirar la señal de esperanzas. Sobrevino un movimiento neonacionalista que significó en aspectos de la cultura, por ejemplo, la valoración y el significado que músicos, artistas, escritores, y hasta el cine encontraron en esa mirada que reflejaron en sus obras que hoy nos siguen conmoviendo.
Paseo en Alameda
Suena de fondo musical “Club verde”, “mi querido capitán” (tiple), hay baile, aparecen bicicletas, globos. Se aprecia un alboroto de “domingo en la Alameda”. Surge de pronto un “efecto tren”, con el humo respectivo, lo que permite un sugerente cambio escena).
Campamento revolucionario
EL: Ya nos alevantamos mi prieta y no hay vuelta pa´tras. El país anda metido en una ventolera, y hoy viene una bola, y mañana –s´toy seguro- va a pasar otra, como la de ayer, y la de antier.
ELLA: Lo peor, mi Nacho, es que ya va como el millón de muertos, y si hemos salvado el pellejo es porque Dios es muy grande…
EL: Sí cierto. Los campos de batalla huelen mal, y como siempre están los que son unos convencidos de que esto ha valido la pena, pero también otra bola de ca… becillas que nada más anda viendo haber que pueden llevarse en la zopilotera.
ELLA: Y cómo surgieron caudillos, de´al tiro un montón, buenos y malos… ya sabes. Y hora nada más andan por a´i Obregón y Calles…
La Valentina (cantada)
Barreteros baile
Jesusita en Chihuahua baile
La rielera baile canción
Nuevo cuadro:
EL: Ya sabemos que la Revolución se movió en tren… y a caballo.
¡Ah! cuanta cosa pasó. Y ya ven, se echaron a mi general Obregón, que hasta dicen las malas lenguas que cuando se preguntaba ¿Quién mató a Obregón? la respuesta era ¡Calles…e! ¡Calles…e! Y no entendía, no entendía…
Vino la guerra cristera ¡Viva Cristo Rey! se oía a cada rato en medio de balazos y gritos…
Vino después la reforma agraria que se materializó con mi general Lázaro Cárdenas, como luego lo fuimos a escuchar en el discurso aquel, famoso del 18 de marzo de 1938, por lo de la expropiación petrolera.
Vino también la segunda guerra mundial, ¿se acuerdan? Y lo del “Escuadrón 201”, y “El Potrero del llano”
Vino… ¿alguien pidió vino?, que aquí repartimos tequila y pulque.
Pregones
Los pregoneros
Canción de la florista
canción de la pajarera
canción de la trajinera
Baile chava flores
Baile mi ciudad
Nuevo cuadro:
EL: Y cómo creció el país, y esos trenes que tanto vimos correr, empezaron a ser desplazados por el hecho de que se construyeron muchas carreteras, y mucha gente de la provincia se vino pa´la ciudad. Aquí encontraron trabajo, muchos pudieron estudiar también. Con presidentes como Miguel Alemán, el ¡viejito! Ruiz Cortines o López Mateos, nuestro país alcanzó mejores posiciones con aquello del “milagro mexicano” y luego con lo del “desarrollo estabilizador”.
Y es que vale la pena decir estas cosas, pa´que se sienta uno orgulloso. No todo es un negro panorama, aunque después vinieron otras como pequeñas revoluciones. El 68 y el 71 con sus movimientos estudiantiles y su “prohibido prohibir”, y sus minifaldas (se oye chiflido arriero)… Y en el 1999 la aparición del ejército zapatista con Marcos a la cabeza…
MARCO HISTÓRICO (No es necesario mencionar la frase “Marco histórico”).
En la segunda mitad del siglo XX, en efecto, circunstancias como el “milagro mexicano” y el “desarrollo estabilizador” pudieron poner en un mejor plano a este país que se incorporaba de lleno a un mejor y más uniforme crecimiento. Las metas en lo general, todavía seguían sin cumplirse a su máxima capacidad, pero instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México, o el Instituto Politécnico Nacional preparaban nuevas generaciones de profesionales que pronto se fueron incorporando a un mercado que se estimulaba con su presencia. Nada es gratuito, y en ese compromiso estaba claro que debían cumplirse los viejos pero renovados principios de Independencia y Revolución.
Contemporáneo
Canción Edo. Guerrero
Baile Edo. Guerrero
Baile danzón Edo. Yucatán
Canción Edo. Yucatan
Canción Edo. Michoacán
Baile Viejitos
Canción Bamba
Baile Bamba
Nuevo cuadro:
MONÓLOGO
EL o ELLA: En 1810, la Independencia. En 1910, la Revolución… Y ahora, en este 2010, ¿qué sigue? ¿La desesperanza o la incertidumbre por tanta cosa mala que viene ocurriendo? ¿Acaso es el país que queremos? ¿Quién está fallando?
Independencia, Revolución ¿fueron necesarias para lo que es hoy día este país?
Y vaya que no fueron obra del espíritu sino de una profunda necesidad de cambios que la muerte se cobró muy caro. Hoy, esta señora sigue rondando –se apellida Narcotráfico- y francamente ya no la queremos. Queremos, en todo caso un mejor país, un México renovado, en el que valga la pena vivir y disfrutar toda su libertad, a plenitud, con todos los bienes que la sociedad busca también para un mejor porvenir. Eso queremos, ¿no creen?
EL o ELLA: Después de esto han pasado tantas cosas, unas muy malas como esos sexenios en que nomás no vemos avance y si la desigualdad, sí la pobreza de millones frente a la riqueza y excentricidad de unos cuantos.
Recordemos que en 1955 se dieron las primeras manifestaciones de enfermeras y ferrocarrileros que fueron reprimidas violentamente.
Recordemos que en 1968 sucedió un duro episodio que cambió la vida de este país, una vez más.
Vinieron los temblores de 1985 y 2017.
Ocurrió la masacre de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y es hora en que no se conoce la verdad.
En este 2018 votaron más de 30 millones por un cambio del que han ofrecido convertir en “Cuarta Transformación”, como señal de mejoría.
En este 2018 han vuelto a despertar los jóvenes, los estudiantes que se vieron agraviados al interior de la Universidad Nacional y reunidos en una sola voz demandaron justicia, lo que en el fondo significa que tenemos que alcanzar la verdadera dimensión del que fue, en sus comienzos el anhelo de otros, que ya no están y que, como nosotros, no perdieron la esperanza.
¡¡¡QUE VIVA MÉXICO!!!
Mariachi
Grito
Popurrí final