EFEMÉRIDES TAURINAS DECIMONÓNICAS.
POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.
Al Profesor Roberto Acosta Cerezo, In Memoriam.
Ayer, 17 de octubre se cumplieron 128 años de la alternativa que recibió en Madrid, España el “torero con bigotes”, Ponciano Díaz. Por tal motivo, hoy es un buen momento para evocar dicha efeméride. Aquella tarde, se celebraba la 14ª corrida de abono en la que se lidiaron toros del Duque de Veragua y de D. José Orozco. Fue padrino Salvador Sánchez “Frascuelo”, y testigo, Rafael Guerra “Guerrita”.
Reproducción del cartel, origen de esta efeméride. Col. del autor.
En realidad, cuando Ponciano arribó a la antigua plaza de la Carretera de Aragón, su presencia incomodó a más de uno, ya que siendo un denominador común el que buena parte de los toreros de a pie y de a caballo ostentaran enormes patillas, el diestro mexicano muy orondo se presentó con recio bigote negro, misma circunstancia con la que también hicieron acto de presencia sus compañeros Celso González y Agustín Oropeza. Esto causó asombro, pues ¡cómo entre tanto patilludo, un bigotón! Por más indirectas al respecto, y de que intentaron persuadir a Ponciano de que se rasurara aquellos bigotes, el hecho es que simplemente se negó y el día de su alternativa apareció en la madrileña plaza de toros no sólo con su continente mismo, sino con aquel talante que seguía causando rumores e incomodidades, tantas como si hubiese recitado estos versos:
Ha dado usted en preguntar…
Ha dado usted en preguntar
y la pregunta es concreta:
¿Puede el bigote alternar
con la espada y la muleta?
¿Me lo dejo o me lo quito?
Oiga, en tan terrible duda
lo que piensa el infrascrito
de esta cuestión peliaguda:
Sin infundios ni camelos
va usted a torear, señor.
Pues, no repara usted en pelos
sobre el labio superior.
Que si quiere usted arrimarse
y es fresco, y para, y recibe,
para mi puede usted dejarse
hasta perilla inclusive.
Días antes de este hecho notable, Ponciano debió hacerse este retrato en algún gabinete fotográfico sevillano, quedando testimonio del que fue su paso por territorio español.
Pan y Toros, Año 2 Nº 49, del 8 de marzo de 1897, p. 3.
De gala los tres, no podía ser menos, sobre todo si era para mantener en todo lo alto el pabellón nacional, justo en unos momentos en que Ponciano era en México ídolo popular absoluto. En aquella temporada, la única que el diestro de Atenco realizó por España (aunque rumores periodísticos ya daban por hecho otra más hacia 1895), tuvo oportunidad de torear en ruedos hispanos y también en algunos lusitanos alrededor de 12 festejos, mismos que se desarrollaron de la siguiente manera:
1.-San Sebastián, España. 10 de julio de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla.
2.-Madrid, España. 28 de julio de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla. Alternantes: “Marinero” y Enrique Santos “El Tortero”. 6 toros de Palha.
3.-Madrid, España. 4 de agosto de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla. Alternantes: “El Tortero” y “Lobito”. 6 toros de Pablo Romero.
4.-Puerto de Santa María, España. 18 de agosto de 1889: Ponciano Díaz y cuadrilla. Alternantes: Enrique Santos “El Tortero” y Rafael Bejarano “Torerito”. 6 toros de Eduardo Ibarra.
5.-Oporto, Portugal. 1° de septiembre de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla.
6.-Villafranca de Xira, Portugal. 3 de septiembre de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla.
7.-Lisboa, Portugal. 8 de septiembre de 1889: Ponciano Díaz y cuadrilla.
8.-Sevilla, España. 13 de octubre de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla. Alternantes: Francisco Arjona “Currito” y Carlos Borrego “Zocato”.
9 y 10.-Barcelona, y San Sebastián, España: sólo están indicadas las actuaciones de Ponciano y su cuadrilla, mas no la fecha.
11.-Madrid, España. 17 de octubre de 1889: Salvador Sánchez “Frascuelo” y Rafael Guerra “Guerrita”. Toros del Duque de Veragua y Orozco. El de la alternativa se llamó “Lumbrero”.
12.-Sevilla, España. 27 de octubre de 1889. Ponciano Díaz y cuadrilla.
Estos datos provienen de una relación que, de forma exhaustiva aparecen en mi libro (inédito): “Ponciano Díaz Salinas, torero del XIX, a la luz del XXI”. Prólogo de D. Roque Armando Sosa Ferreyro. México, 404 p. Ils., fots., retrs., facs., cuadros. (APORTACIONES HISTÓRICO TAURINAS MEXICANAS 13, Biografías Taurinas, 2). En tal registro, quedaron anotadas 721 actuaciones (que van de 1866 hasta 1899) que, como se ha de comprender, además de abarcar ruedos en México, España y Portugal, también lo hizo al incursionar por Estados Unidos de Norteamérica y Cuba. Todo un caso, si además se considera entre otros factores, el tipo de medio de transporte que utilizaban para desplazarse por aquellas épocas, incluyendo los desagradables sobresaltos.
Y entre versos y corridos, Ponciano consumaba una más de sus caras aspiraciones:
ADIÓS A MADRID DEL VALIENTE ESPADA PONCIANO DÍAZ
Después de triunfos gloriosos,
que alcanzó en Madrid, Ponciano
sus adioses cariñosos
así te dio al pueblo hispano:
Adiós, pueblo soberano,
nunca olvidaré en mi vida,
la cariñosa acogida
con que el pueblo madrileño.
me aplaudió en el desempeño
de suerte reconocida.
Adiós, plaza de Madrid
que me aplaudió con anhelo;
de “Lagartijo” y “Frascuelo”
me tengo que despedir.
-Ojalá pueda venir
otra vez a disfrutar,
lo que no podré olvidar,
que en esta plaza gocé.
Donde manolas miré
que no hay con qué comparar.
Lo que ignoraba Ponciano es que al regresar a su México querido, el panorama habría de cambiar en forma adversa, pues sus seguidores, que eran legión, se dieron cuenta, a través de la prensa que “el torero con bigotes” había cometido una traición. ¿Cómo era posible que Ponciano aceptara la invitación de Luis Mazzantini para obtener, de este diestro en funciones de intermediario, la alternativa en España? Pero además: ¿cómo era posible que Ponciano vistiera el traje español, e hiciera suertes “a la española” si eso no era lo suyo? Ponciano era la viva imagen del nacionalismo. En el México de finales del XIX, las únicas imágenes valiosas para el pueblo, y que este hacía suyas y se aferraba a ellas eran: la virgen de Guadalupe, los curados de Apam… y Ponciano Díaz.
Poco le duraría el gusto a Ponciano Díaz, pues aunque seguía paseándose por Bucareli o la calle de Los Plateros arrancando suspiros y aplausos, vistiendo lo mismo el traje de charro con mucha galantería que el traje de paisano con el porte de un hombre de ciudad, el hecho es que el pueblo se iba a tomar muy en serio aquel asunto, mismo que aceleró la declarada inclinación que tuvo por las bebidas embriagantes nuestro Ponciano, además del pésimo papel que, como empresario comenzó a desempeñar más o menos desde 1892.
El hecho es que hoy, 17 de octubre de 2017, volvemos a encontrarnos con Ponciano Díaz para rememorar un aniversario más de su alternativa. Antes de Ponciano ya habían estado en territorio español Ramón de Rosas Hernández (a finales del XVIII). Y luego por 1869 llegó a dicha península Jesús Villegas “El Catrín”, pero el primero en ser reconocido en forma por demás contundente con la alternativa misma, fue Ponciano que, para recordar todo asunto conmemorativo diré que su nacimiento ocurrió el miércoles 19 de noviembre de 1856 (y se atribuyen hasta siete sitios, a saber: Chapultepec, Tepemachalco, Santa Cruz Atizapán, San Juan la Laguna, Zazacuala, la Vaquería, –que eran dos de los anexos de la hacienda- y “la covacha”, pequeño cuarto que se encuentra a la entrada del casco de la hacienda de Atenco, donde eran atendidas las mujeres durante el parto). Muere en la ciudad de México el 15 de abril de 1899.
El Redondel. El periódico de los domingos. 26 de diciembre de 1971. Este recorte proviene de la colección de Roberto Mendoza Torres.